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December 21, 2018
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Catholic Advance
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Calendario Hispano
Planificacin Familiar Natural en espaol: Para ms infor- macin e inscripcin en cualquiera de las siguientes clases favor de comunicarse con Marisa Hernndez en la Oficina del Ministerio Hispano al 316-269-3919. Lunes 7 de enero 3 p.m. en el Saln Madre Teresa, San Pa- tricio. Mircoles 16 de enero 8 p.m. Perpetuo Socorro, Centro Pa- rroquial. Domingo 20 de enero, 2 p.m., Catedral, Saln Pio X. Lunes 21 de enero 3 p.m. Centro Pastoral Hispano. Cursillo de Cristiandad - Escuela de Dirigentes Ultreya en Wichita: ltimo viernes del mes a las 7 p.m. en la cafetera de la Iglesia San Patricio. Escuela de Dirigentes en Wichita: primer y tercer viernes del mes 7 p.m. en el saln Madre Teresa de la Iglesia de San Patricio. Coordinador: Lauro Lpez, tlf. (316) 559-3776. Ultreya en Ark City: alternando Escuela de Dirigentes, tercer domingo de cada mes, despus de la Misa de 11 a.m. Coordinado- ra: Isabel Rodriguez tlf. (620) 660-5180. Escuela de Dirigentes en Hutchinson: segundo viernes de cada mes, 7 p.m. Coordinadora: Norma Urueta tlf. (620) 474-5238. Seminario de Preparacin Matrimonial 2019: Centro Pas- toral Hispano, 9 de febrero, 4 de mayo, 10 de agosto. Para ms informacin e inscripcin, favor comunicarse con Jake Samour al (316) 202-0645.
Por Jake Samour
Cada ao celebramos la tem- porada de Adviento. Todos los aos espero con gran anticipa- cin sentarme alrededor de la mesa en casa con mis hijos para rezar nuestras oraciones de Ad- viento, deco- rar el rbol de Isa (the Jesse Tree) y cantar las canciones especiales. Se ha convertido en uno de mis m o m e n t o s favoritos del ao. Y as su- cedi de nue- vo este ao, todos compitiendo por su turno para encender nuestras velas de Adviento para comenzar la oracin y despus su turno para apagarlas despus de la oracin final. Cada noche rezamos ora- ciones de anhelo y expectativa, y cantamos canciones de espe- ranza y promesa. Durante el Adviento espe- ramos el misterio, esperamos a Aquel que ya vino, sigue vinien- do y vendr otra vez. En una oca- sin, durante la primera semana, mi hijo reflexion y dijo: "Qu extrao parece esto!" Antes de responder, reflexion: s, despus de todo, Emanuel, Dios con no- sotros, ya ha venido y ha hecho su morada entre nosotros. Jess, nuestro Seor, comparti nuestra vida en la tierra con todas sus ale- gras, sus esperanzas, sus decep- ciones y su amargura. Sin embar- go, lo esperamos, en su segunda venida. A pesar de todo, an reza- mos: "Ven." Esperamos la venida del Seor, como tantos lo hicieron hace mucho tiempo, quienes vie- ron ese da an muy lejano en la distancia y hubieran agradecido fervientemente su llegada. Seor, todava ests por venir. Como sucede a menudo, pero cuando menos lo espero, es a travs de mis hijos que el Seor muestra la verdad y la realidad del significado ms profundo de las cosas. En otro caso, una de mis nias intervino y comenz a hablar sobre cmo sera la se- gunda venida de Jess. El mero hecho de que esto es lo que es- taban discutiendo y preguntan- do: cmo ser la Parusa y cmo quisieran estar listos para ese da, me dio una idea de mi pro- pia ceguera. Su confianza sen- cilla y perfecta fue bastante sor- prendente para m. S, se dice que vendrs de nuevo, y esto es cierto. Pero mientras mis hijos hablaban, me di cuenta de que las palabras de nuevo significan algo diferente de lo que espera- ba. Cristo, que vino una vez en la carne, est preparado para volver otra vez hoy. Cuando eliminamos todos los obstculos a su presencia, segu- ramente, en cualquier hora y mo- mento, morar espiritualmente en nuestros corazones, trayendo consigo las riquezas de su gracia. Aunque sent que estaba hacien- do un nuevo descubrimiento, de alguna manera sent que ya lo saba. Y lo experiment a travs de mis hijos: estoy invitado a un nivel ms profundo de anhelo de recibir al Seor: ha venido, sin embargo, todava est aqu con nosotros, siempre en el proceso de acercarse a nosotros y siempre en el proceso de acudir a quienes abren la puerta de sus corazones hacia l. Debemos preparar nues- tros corazones para la venida de Cristo, porque l vendr cuando menos lo esperamos. Recuerdo esto cada noche cuando nos re- unimos, leemos y aprendemos como familia sobre los santos hombres y mujeres del Antiguo Testamento y su espera que fue tan paciente. Cada Adviento, juntos como familia, desempacamos y redes- cubrimos las maravillas que el Seor ha trabajado en el pasado y contina trabajando por noso- tros. Experimentamos nuestra historia de salvacin e igual como los pocos que esperaron hace mucho tiempo la promesa hecha a nuestros padres, deci- mos "Ven, Seor". De alguna manera hacemos eco de las pa- labras de nuestra madre Santa Mara: "Aqu tienes a la sierva del Seor; hgase conmigo con- forme a tu palabra." (San Lucas 1, 38). "Oh Jess, tu vendrs, concdenos la gracia de vivir hoy, en la hora de tu Adviento, de tal manera que podamos me- recer vivir en ti para siempre, en la hora maravillosa de tu eternidad. Oh Jess, te elegi- mos ahora, como nuestro Seor y nuestro Dios. Ven Seor y no demores." Feliz Navidad y Feliz Ao Nuevo! Jake Samour es el director de la Oficina de la Pastoral para Matrimonios y Vida Familiar Cuando era jovencito, crean o no, yo haba considerado llegar a ser un misionero, uno de esos sacerdotes misioneros que van a China o Asia o hacia algn lugar lejano a vivir y predicar el Evangelio. Siempre ha- ba estado fascinado de las muchas historias de sacerdotes misioneros, como la de San Junpero Serra o San Francisco Javier o San Isaac Jo- gues y los muchos otros que dejaron sus hogares, familias y que fueron a lugares muy lejanos para llevar el Evangelio a aquellos que nunca lo haban escuchado. Eventualmente, yo abandon esa idea y decid que Dios estaba llamndome a ser un sacerdote diocesano y a servir al pueblo de Dios en el ministerio or- dinario parroquial. Pero la verdad es que incluso dentro de ello e incluso ahora en mi ministerio episcopal, yo soy en verdad un misionero y t tambin, s t aceptas el llamado de tu bautismo, por que cada miembro de la Iglesia es un verdadero misio- nero en su corazn. En el Evangelio del Cuarto Do- mingo de Adviento, vamos a or acerca de la primera jornada mi- sionera cristiana, la visitacin de la Virgen Mara a Sta. Isabel. Cuando el ngel le haba anunciado a ella el plan de Dios de traer al mundo el Mesas dentro y a travs de ella y cuando ella de hecho dio su libre consentimiento a la voluntad de Dios, diciendo, FIAT, "que se haga en m segn tu palabra," ella no retuvo esta buena nueva para ella misma, sino que fue de prisa a vi- sitar su prima, Santa Isabel, quien a su vez estaba encinta en circunstan- cias inusuales. Su encuentro les trajo a ambas un gran gozo al momento que ellas compartieron una con la otra como Dios en su amor y mi- sericordia haba mirado en ellas su humildad. Se nos dice que ellas es- tuvieron tres meses juntas, sin duda reflexionando da tras da en las ma- ravillas de Dios, preguntndose una a la otra sobre el futuro y lo que Dios ha planeado y apoyndose una a la otra en los momentos en donde las preguntas no son fcilmente contes- tadas, pero donde la fe interviene. Si, la Virgen Mara es verdaderamente la primera cristiana misionera. Mis queridos hermanos y herma- nas, nosotros somos miembros de una comunidad de fe misionera, una comunidad que enva sus miembros hacia adelante a vivir y a proclamar el amor de Dios por nosotros en Je- sucristo. Eso es lo que hace un mi- sionero; l o ella salen a anunciar la Buena Nueva y as otros conocern El instituto te invita a ali- mentar tu fe para que as; lo que aprendas y escuches, lo puedas transmitir a todos con la alegra de estar "plenamente vivo como discpulo misionero." El Instituto de Formacin de Fe te ofrece esa oportunidad para alimentar tu fe. Las inscripciones estn abiertas para las clases que comenzarn en enero. La noche de orientacin e inscripciones es el martes, 8 de enero a las 7 p.m. en el saln Good Shepherd" de la Cate- dral. Este trimestre estaremos ofreciendo los martes: Hechos de los Apstoles, Relaciones Humanas y Liderazgo, Sacra- mentos y Liturgia, y los jueves: Biblia, Historia de la Iglesia, Catequesis II y Verdades de la Fe I. Cada materia consta de 10 clases de 7 a 9 p.m. Ofrecemos cuidado de nios de 2 a 10 aos. Si desea ms informacin, puede llamar a la oficina del Ministerio Hispano al 316-269-3919 o acrcate al Centro Pastoral San Jos en la 437 N. Topeka en Wichita. Como iglesia, se nos ha con- fiado el depsito de la fe. "Todo el Pueblo de Dios, con el sentido sobrenatural de la fe, sostenido por el Espritu Santo y guiado por el Magisterio de la Iglesia, acoge la Revelacin divina, la comprende cada vez mejor, y la aplica a la vida." (CIC 94) Los esperamos! En la foto algunos de los estudiantes y maestros del pasado trimestre del Instituto de Forma- cin de Fe. Una vez ms terminan sus estudios con una Fe ms reforzada y alimentada. Este trimestre felicitamos en especial a Maribel Hernndez, Magdalena Esquivel y Santos Bauelos por haber completado todos los cursos del Instituto y recibieron una Certificacin Avanzada de Catequesis.
Ven, Ven Seor no tardes
Jake Samour
Alimenta tu fe, vive como discpulo misionero
La Llamada Navidea a compartir
y llegarn a creer lo que nosotros sa- bemos y lo que creemos. As como lo hizo la Virgen Mara cuando ella fue con Santa Isabel, as tambin nosotros debemos ir de prisa con los dems, en nuestras familias, en nuestros vecindarios, en nuestras escuelas, en nuestros lugares de em- pleo, en pocas palabras a todos los rincones de nuestra vida, para com- partir la Buena Nueva de Jesucristo. Y con el objetivo de ponernos en marcha, tenemos que ser envia- dos; tenemos que escuchar la or- den s irs a traer a otros a Cristo. Esa palabra, esa orden procede de nuestros sacerdotes, quienes estn ordenados para servir a los discpu- los de la Iglesia, para ofrecerles los sacramentos, para ensearles como dar testimonio a la familia, amigos, vecinos, y compaeros de trabajo y fortalecerlos y motivarlos para esta misin. Nuestros sacerdotes, en co- laboracin con el obispo, son vita- les para el trabajo misionero de la Iglesia, parroquias, escuelas y otros ministerios. Los necesitamos para predicar, ensear y enviar. Hoy, como es nuestra costum- bre, invito a la Dicesis de Wichita a considerar un regalo generoso a la Llamada Navidea a Compartir, lo cual me ayuda a proveer los recur- sos para la formacin de los futuros sacerdotes, as como tambin bene- ficios para nuestros sacerdotes ya jubilados, quienes han servido a la Iglesia por muchos aos. Nosotros ciertamente estamos bendecidos en esta dicesis con grandiosos sacerdotes y si Dios quiere ms por venir. Por favor ap- yenme en mi deber de garantizar que nuestros sacerdotes estn bien formados para el futuro ministerio y para ofrecer a nuestros sacerdotes jubilados los beneficios que justa- mente se merecen. En el pasado, se ha visto una gran generosidad de parte de cristianos comprometidos de nuestra dicesis. Una vez ms estoy contando con esa gran gene- rosidad. Que la Virgen Mara, la primera de nuestros misioneros del Seor, nos inspire a todos a salir hacia el mundo con la misin de hacer dis- cpulos para Jess. Que nuestras almas, como la de Ella, engrandez- can al Seor por todo lo que l ha hecho y har por nosotros. Y que todos nuestros sacerdotes, quienes merecen nuestro apoyo, proclamen a todos aquellos que los escuchen, el llamado a todos nosotros a ser Plenamente Vivos como Discpulos Misioneros de Jesucristo!
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